La historia de Jimena

 

Hace ya dos añitos, un 13 de abril muy lluvioso comenzó mi particular aventura por ser mamá, en una ciudad nueva un doctor de bata blanca y canas en el pelo colocó en mí una semillita que fue germinando poco a poco en mi interior y después de unos días de espera, el 14 de mayo volví a visitar al doctor de bata blanca para confirmar la buena noticia, tu semillita ya crecía dentro de mí, eras del tamaño de una lentejita y poco a poco fuiste creciendo en mi barriguita, mientras yo te cuidaba y te cantaba, íbamos juntas a bailar, a nadar, a la playa y a pasear, te gustaba sentir los rayos de sol y el agua del mar.

Pasaron unos meses y cada vez crecías más y más rápido y tu cuerpecito iba tomando forma de personita; esperaba con ilusión cada vez que escuchaba tu corazoncito latir y veía tu foto en blanco y negro. En una de esas visitas para verte me confirmaron que eras una niña y comencé a prepararlo todo para tu llegada. Los meses de espera pasaron muy rápido y al fin casi de regalo de reyes el 10 de enero de 2019 te acurruqué por primera vez entre mis brazos y vi tu carita y tus ojos mirándome, eras mi sueño hecho realidad. Ese sueño tenía un nombre con carácter y fuerza, Jimena.

Llegaste a mi vida para llenarla de luz y amor sincero por eso cada día me siento más orgullosa y feliz de tenerte a mi lado y ver cada logro que consigues y esta sólo acaba de comenzar porque nos quedan muchas hojas que escribir en el libro de nuestra vida juntas.

La familia de Jimena, de la clase Luna, de uno y dos años

 

Abrir chat
Hola
¿En qué podemos ayudarte?
Ir al contenido